Hasta el 4 de octubre es posible ver en el Espacio Muro-Vime, el recorrido visual por la trayectoria del grupo de música antigua de la U. de Santiago, fundado en 1980, a través de fotografías, programas de mano, correspondencia y recortes de prensa. Además el Archivo Patrimonial Usach trabaja en la digitalización de todos estos documentos para el acceso público.
Eran fines de los 70 y un grupo de entusiastas músicos sub 30 decidían ir contra la corriente del new wave, el glam y el pop electrónico, lo estilos de moda de la época, para dar un salto al pasado y recobrar melodías clásicas del siglo XVI. Vestidos de terno impecable, Julio Aravena, Miguel Aliaga, Victor Rondón y Ernesto Quezada comenzaron a interpretar bajo el nombre de Syntagma Musicum y con instrumentos que iban del clavecín a la tiorba, obras europeas de la época barroca y más atrás, encantando lentamente a un público poco habituado a estos sonidos.
“Era un proyecto ambicioso, porque al principio abarcamos el medioevo, el renacimiento y el barroco. Mirándolo hoy era una locura; había que andar con muchos instrumentos diferentes para abarcar varios siglos de música hasta que de a poco fuimos integrando repertorio más americano”, recuerda el ex integrante de Syntagma Musicum, Julio Aravena, quien por años recopiló la historia del conjunto que en 1980 se incorporó oficialmente dentro de los elencos de la U.de Santiago, y que ahora lidera un proyecto que lo saca a la luz pública.
Con financiamiento de Fondart -de la línea de investigación y registro de la música nacional-, el músico e investigador ha rescatado todo tipo de material visual entre fotografías, recortes de prensa, afiches, correspondencia y programas de mano que ahora, en una primera etapa del proyecto, se reúnen en una exposición que resume y revela los inicios del conjunto y que se exhibe hasta el 4 de octubre en el espacio Muro de Vinculación con el Medio de la U. de Santiago. En paralelo, la musicóloga María Francisca Moraga ha comenzado la digitalización de todo el archivo con el objetivo de ponerlo al acceso público a través del sitio web del Archivo Patrimonial Usach. “Se trata de documentos únicos y exclusivos que van desde la formación oficial del grupo en 1980 hasta 2017, mostrando una trayectoria que incluso ha cruzado fronteras, dando cuenta de conciertos en México, Portugal, Argentina, Venezuela, Brasil y Bolivia, además de los festivales y conciertos de extensión que se hacen desde 1992 hasta hoy en la Usach”, cuenta la investigadora.
Después de sus inicios con el repertorio europeo Syntagma Musicum se posicionó en la escena local por el rescate de melodías de este continente, transformándose, por ejemplo, en los primeros en grabar el “Cancionero Chilidugú” del padre Bernardo de Havestadt, música en las misiones Jesuitas de la Araucanía en el siglo XVIII, que fue resultado de una investigación musicológica llevada a cabo por Víctor Rondón y que fue interpretada por Syntagma Musicum junto al Coro de Niños de la Comunidad Huilliche de Chiloé, en 1998.
Pioneros locales
La exposición en el Espacio Muro-Vime rescata documentos clave de la época temprana del conjunto musical como el primer programa de concierto de 1979 o la puesta en escena de “La Púrpura de la rosa”, ópera compuesta por Tomás de Torrejón y Velasco sobre un libreto de Pedro Calderón de la Barca, que fue la primera ópera en ser compuesta e interpretada en América en 1701 y la única que sobrevive del repertorio del autor de origen español. También se exhiben fotografías de algunas de las presentaciones de Syntagma Musicum, entre las más singulares las que realizaron en televisión durante los ochenta, para programas masivos como Sábados Gigantes y en la franja cultural de TVN. “En una segunda etapa se subirán al sitio web las grabaciones más emblemáticas del grupo que serán rescatadas de los casettes originales, además de varias tomas en vivo. El objetivo es que podamos catalogar el archivo sonoro con su imagen del programa correspondiente para que la gente pueda tener todo el material en orden”, adelanta Moraga.
Aunque su elenco ha sufrido modificaciones en estas cuatro décadas, Syntagma Musicum continúa ejerciendo su labor como el grupo más longevo de Chile en la difusión de la música antigua. Actualmente la dirección musical está a cargo de Franco Bonino, quien interpreta la flauta dulce, Rodrigo Díaz en la tiorba y laúd, Jaime Carter en el clavecín, Gonzalo Cuadra en voz y Hernán Muñoz en violín barroco, ambos de los miembros más estables de la agrupación desde los 90 y Paulina Muehle-Wiehoff en el cello barroco, quien es una de sus últimas incorporaciones.
La agrupación tiene en curso una temporada estable en el Teatro Aula Magna y todos los años lidera el Festival Internacional de Música Antigua, que este año se hará entre el 4 y 9 de noviembre.
Texto Denisse Espinoza.
Entrevista Daniela Valdés.
Exposición Syntagma Musicum, 40 años de historia
Espacio Muro-Vime
Ubicado en el edificio de la Vicerrectoría de Vinculación con el Medio
Las Sophoras 175, Estación Central.
Abierta hasta el 4 de octubre, de lunes a viernes de 9 a 21 horas.
Entrada liberada.